FeTERA
Energéticas

Se retoma el camino de la entrega de los hidrocarburos

Sobre el acuerdo petrolero con Chevron

Por Gabriel Martínez, Sec. de organizaión de FeTERA

El decreto 929/2013 firmado por la Presidenta Cristina Fernandez de Kirchner crea el Regimen de Promoción de Inversión para la Explotación de Hidrocarburos.

 

Este régimen se ajusta a principios y propósitos que merecen la máxima atención a fin de evaluar las consecuencias que se pueden derivar de su aplicación.

Primeramente se especifica que el mayor objetivo de nuestro país que es de “de lograr el autoabastecimiento de hidrocarburos”.

Para lograr este objetivo se prevé “El incremento de las inversiones (…), la promoción de la inversión nacional y extranjera directa (…) además de la incorporación de nuevas tecnologías (…) que contribuyan al mejoramiento de las actividades de exploración y explotación de hidrocarburos…

El Contrato con Chevron.

Apenas publicado este decreto, se anunció la firma de un contrato con la empresa estadounidense Chevrón, que según el viceministro de  economía Axel kisillof llevó más de diez meses de negociación e incluye la perforación de más de cien pozos y la inversión de 1500 millones de dólares, para extraer hidrocarburos no convencionales mediante la técnica del fracking o fractura hidráulica.

El fundamento de nuestra soberanía petrolera.

La industria petrolera nacional, estatal y soberana, surgió para satisfacer nuestras necesidades domésticas e industriales de combustible, y tuvo desde un principio la intención de desarrollar una política disociada de los intereses de las empresas transnacionales.

Enrique Mosconi, explicaba que “dos organizaciones, la fiscal y la privada, no pueden coexistir, pues representan intereses antagónicos, destinados a vivir en una lucha de la cual sólo por excepción saldrá triunfante la organización estatista. Para asegurar para nuestro país la riqueza petrolera debe encararse a fondo la cuestión, siendo ello imposible de lograr mientras el Estado no monopolice íntegramente la explotación de sus yacimientos”.

El Desarrollo de nuestras fuentes de energía

Entre 1907 y 1990, la Argentina desarrollo una política autónoma que permitió llevar la electricidad y los combustibles, a todos los rincones del país, creando una diversidad de fuentes de energías, que permitieron el desarrollo químico y petroquímico, el nuclear, el hidroeléctrico, junto a la generación térmica y la distribución de  gas natural por redes.

Las ganancias o renta de la energía, sirvieron para garantizar la infraestructura caminera, hospitalaria, educativa, vial y científica de nuestro país.

El Proceso Militar y la Etapa Neoliberal

Entre 1976 y la actualidad se fueron implementando políticas de entrega de patrimonio público, recursos naturales, empresas públicas, deterioro y desaparición de la industria nacional, empobrecimiento, desocupación, empleo precario, subsidios y deterioro de la infraestructura vial educativa y sanitaria.

La recuperación del 51% de YPF

En 2012 valoramos positivamente la recuperación del 51% de las acciones de YPF. Pero opinamos que con eso solo no alcanzaba, que había que cambiar todo el modelo energético basado en la actuación de empresas privadas transnacionales, que además de saquear nuestros recursos llevaron a la crisis energética que se manifiesta con carísimas importaciones de gas, falta de energía eléctrica, falta de gas oil y naftas, capacidad muy limitada de refinación y un sistema intrincado de subsidios que garantizan elevadísimas tasas de ganancias a las empresas transnacionales.

Lo de Chevron retoma el camino de la entrega.

En apenas unos meses se volatilizaron las expectativas

El acuerdo con Chevrón es secreto, pero se conocen ciertos contenidos que desalientan cualquier expectativa de profundización de una política soberana.

Lo primero que se sabe es que en caso de reclamo jurídico, el Estado debe presentarse en tribunales extranjeros

Las nuevas tecnologías a que refiere el decreto, fracking o fractura hidráulica, no son nuevas, pero si muy contaminantes, han sido prohibidas en Francia y Bulgaria, suspendidos en Vermont  y Nueva York (Estados Unidos), Quebec (Canadá), y otras regiones de Europa.

Chevron ha sido condenada judicialmente, por el enorme daño ambiental provocado en Ecuador, a indemnizar a ese país con U$S 8600 millones, además de pedir disculpas públicas.  La suma se elevó a U$S 19.000, cuando la empresa se negó a disculparse.

Las zonas que se adjudican para explotar (Vaca Muerta y Loma de la Lata Norte), son más petroleras que gasíferas. Argentina adolece de falta de gas y casi no tiene capacidad para refinar más petróleo.

Parece que no es el autoabastecimiento lo que se busca, sino nuevos recursos de exportación.

Chevón tendrá libertad para exportar petróleo y dólares, además de vender en Argentina a precio internacional.

La utilidad del contrato

¿Para qué sirve un contrato con una empresa transnacional, que en definitiva no realizará ninguna inversión, disfrutará de la libre disponibilidad de petróleo y de dólares, contaminará con técnicas de extracción que ya utilizó y desechó YPF hace 30 años y generará derechos sobre nuestros recursos hidrcarburíferos?

A los argentinos para nada. Le sirve a Chevron y a los particulares que se van a beneficiar con esta nueva entrega del petróleo que debería defenderse como un bien común, y un problema de todos.