La solidaridad de la FeTERA y CTA se hizo sentir los días 7, 8 y 9 de agosto.

Por Gabriel Martínez*

[Galería de fotos de la jornada]

Después de 115 días de lucha con paro ininterrumpido, los trabajadores del sindicato de Luz y Fuerza de Zárate lograron un triunfo muy importante. Durante la audiencia en el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, se acordó la apertura de una instancia de diálogo por sesenta días corridos. Suspender preventivamente los efectos de los despidos por el plazo de la instancia de diálogo. Exhortar a la empleadora a formular una propuesta respecto de la solicitud formulada por la entidad gremial sobre el pago de los haberes caídos desde la declaración del conflicto. Exhortar a las partes a garantizar el fiel cumplimiento de las normas laborales y a la paz social en el marco de las relaciones laborales.

Los compañeros del Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate cumplieron 115 días de paro luego de que los trabajadores Carlos Funes y Christian Javier Altamirano fueran cesanteados por la CEZ, debido a su afiliación a este Sindicato.
 
El paro se cumplió de manera estricta durante todos los días y los 40 trabajadores afiliados abandonaron su lugar de trabajo por más de 3 meses para concentrarse en el Sindicato. Todas las mañanas, desde las 7, se reunían para realizar las tareas militantes, propias de la actividad gremial que llevaron adelante.
 
El martes 7 de agosto, se decidió llevar adelante una serie de acciones para elevar el nivel de exposición de esta pelea y mejorar la comunicación con los vecinos, que ya era buena.
 
El miércoles 8, desde las 7 de la mañana, se iniciaron las manifestaciones, con la instalación de los trabajadores que estaban de paro, en las veredas y adyacencias de los edificios de la CEZ. A éstos se les sumaron compañeros de distintos lugares de la provincia, mayoritariamente del gremio de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), para dar una mano a los trabajadores cesantes y a los representantes de la conducción de la FeTERA que estaban en el lugar. También se hicieron presentes compañeros del Bloque Organizativo Gremial de la CTA Nacional y del Consejo Directivo Nacional de ATE.
 
A partir de las 8 de la mañana comenzó a levantarse una carpa en el edificio administrativo de las calles Andrade y Bolívar. Mientras, en el otro edificio, se bloqueó por completo la salida de vehículos hasta las 17 horas. A partir de ese momento se juntaron todos los compañeros en la carpa del edificio de Andrade y Bolívar, donde decidieron continuar con la medida hasta el día siguiente, cuando se diera la audiencia.
 
Cerca de las 20 horas, una Fiscal de apellido García intimó a los trabajadores a desalojar el lugar donde estaban reunidos y mandó a la policía a hacer efectivo el desalojo.

Cuando los compañeros tomaron conocimiento de esta situación, comenzaron a pedir solidaridad y convocar a diversos sectores, además de los familiares y amigos de los trabajadores que inmediatamente comenzaron a poblar todo el lugar, formando parte, de esta manera, de la lucha gremial. Luego de un tiempo se hizo presente la policía para discutir el desalojo, pero se llegó a un acuerdo de habilitar media calzada para que pudieran circular autos y colectivos. De esta manera, los trabajadores pasaron toda la noche en la carpa.
 
El jueves, día en que se realizaría una audiencia de “conciliación voluntaria”, en el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, a media mañana, comenzó a concentrarse, en cercanías de la carpa, un grupo de vecinos, de aproximadamente 80 personas, armados con palos y cadenas.

Este grupo, manifiestamente identificado con el Presidente de la Cooperativa, José Luis Mangini, se dirigía a la carpa en una actitud violenta que evidentemente iba a llevar a un enfrentamiento, que finalmente no se concretó.

Cerca de las 3 de la tarde comenzó la reunión en la cartera laboral, donde se iba a lograr un triunfo muy importante para Luz y Fuerza de Zárate y para toda la FeTERA.

Este resultado, evidentemente estuvo empujado por las acciones desplegadas frente a la cooperativa y por la aceptación que dio el Pueblo de Zarate, que en ningún momento descalificó la actitud de los trabajadores.

Los trabajadores no solamente demostramos dignidad en nuestro comportamiento, sino que también fuimos capaces de estar firmes en nuestros reclamos y no retroceder un solo paso ante la amenaza de la agresión.

Nueva Reunión y Retroceso

El martes 14 se realizó una nueva audiencia donde las partes comenzarían efectivamente a recorrer los sesenta días de diálogo.

El Sindicato, representado por su Secretario Adjunto, Nestor Iparraguirre, Oscar Martínez, como Secretario Gremial, Carlos Di Paolo, Secretario Administrativo, Sebastian Bruno del Bloque Organizativo y Gremial de la CTA y Gabriel Martínez, Secretario de Organización e Interior de la FeTERA presentó copia certificada del acta donde los trabajadores aprueban lo actuado y aceptan las condiciones del diálogo.

La Cooperativa, representada por su Presidente, José Luis Mangini el abogado Claudio Funes y el Síndico Hugo Funes, generó la primera sorpresa cuando admitió que no había podido ratificar el compromiso de la reunión anterior.

Como alternativa ofrecía discutir una cifra económica que representara los salarios caídos de los trabajadores en conflicto.

Acertadamente el Director Provincial de Relaciones Laborales, el abogado Daniel Montes de Oca, le aclaró al presidente de la cooperativa que la propuesta aceptada el jueves anterior era de carácter integral y no podía ser tratada parcialmente.

Luego de varios intentos de cambiar el eje de la discusión, incluso apelando a la amenaza física, los representantes de la cooperativa informaron que convocarán a asamblea de delegados de los socios en la semana del 27 de agosto, lo que generó el compromiso de una nueva reunión en el Ministerio de Trabajo para el día 29.

La Cooperativa incumplió su compromiso e intentó generar uno nuevo, basado en acuerdos de pagos de dinero, que dejaran de lado la discusión por la reinstalación definitiva de los trabajadores y el derecho a la filiación libre.

Todavía no se ha iniciado el plazo de los sesenta días de diálogo, ello ocurrirá cuando la asamblea de la CEZ apruebe o rechace lo actuado.

La asamblea de la CEZ, se ha convertido así, en una instancia decisiva para el conflicto y requiere de parte de los trabajadores la elaboración de estrategias que busquen la resolución favorable sobre los derechos de los compañeros.

Se hace imperioso recorrer puerta por puerta la ciudad de Zárate,

30.000 titulares de medidores van a estar representados en la asamblea de socios, necesitamos que la mayoría entienda que este conflicto de carácter gremial, se inició porque el Consejo de Administración, presidido por un abogado laboralista, desconoció la Declaración Universal de Derechos Humanos, los Convenios Internacionales de la OIT, La Constitución nacional y la Ley 23551, dejando sin trabajo a dos compañeros por afiliarse al Sindicato Luz y Fuerza de Zárate.

Hace años que la CEZ, carga con la culpa de la muerte y mutilación de compañeros que bajo contratos de tercerización, no cuentan con capacitación laboral ni se los instruye en materia de seguridad e higiene.

La última muerte producida en esta cooperativa, en el mes de febrero de este año, fue la de Rodrigo Magallanes. La bronca que produjo entre sus compañeros, llevó a varios trabajadores, entre los que se encontraban Carlos Funes y Christian Altamirano a solicitar la afiliación al Sindicato Luz y Fuerza Zarate, reconocido por la lucha permanente en defensa de los derechos de los trabajadores. 48 horas después ambos trabajadores fueron despedidos.

Luego de 120 días de lucha el gran esfuerzo de volcar la opnión de los socios a favor de los trabajadores de la CEZ, puede resolver un problema que nos político, es de Derechos Humanos.

*Gabriel Martinez, Sec. Organización e Interior de FeTERA
Viernes 17 de agosto de 2012

Ver galería de fotos

 {gallery}fotosnotasfetera/zarate-789-agosto{/gallery}