El presidente electo argentino Milei quiere privatizar la energía… y todo los demás.
Los argentinos, hartos de una inflación anual superior al 140% y de una tasa de pobreza que alcanzó el 40%, han elegido al economista libertario de derechas Javier Milei. El domingo 19 de noviembre de 2023, Milei derrotó al Ministro de Economía, Sergio Massa, por un amplio margen, 55,7% a 44,3%, y ganó en todas menos en tres de las 24 provincias del país. Había hecho campaña con la promesa de privatizar las empresas estatales, recortar drásticamente el gasto público, dolarizar la economía, eliminar el Banco Central y cerrar ministerios clave, entre ellos los de sanidad y educación.
Milei considera prioritaria la privatización de la petrolera estatal argentina, YPF. «Lo primero que hay que hacer es reestructurarla para que YPF pueda «venderse de una manera muy favorable para los argentinos». Y añadió: «Todo lo que pueda estar en manos del sector privado estará en sus manos». Milei dijo que también privatizaría la TV Pública, Radio Nacional y la Agencia Nacional de Noticias (Telám). Las acciones de YPF Argentina, que cotizan en Nueva York, se dispararon más de un 40% tras el anuncio.
Los comentaristas han señalado que un programa de privatizaciones tan radical requerirá reformas constitucionales y, en algunos casos, nuevas leyes de un Congreso en el que Milei aún no tiene mayoría.
Los sindicatos argentinos llaman a la acción
Hugo «Cachorro» Godoy, Secretario General de la CTA-Autónoma, ofreció un primer análisis de los factores detrás de los resultados. «Votamos en contra de este gobierno (de Alberto Fernández), que no cumplió ninguno de los objetivos y compromisos asumidos, y que en principio eran la antítesis de las políticas de Macri y las imposiciones del FMI. Terminamos cuatro años de gobierno peor que cuando empezó, sobre todo en lo económico y en lo social. Milei llega sobre la base de la fragmentación del campo popular [base de la clase trabajadora] y la fragmentación de las relaciones laborales, donde la precariedad ha producido daños económicos y sociales, incluyendo un 43% de pobreza y un 10% de hambre. Frente a la negación (de Milei) … del Estado como instrumento de equidad y equilibrio en una sociedad, es indispensable construir un programa alternativo para reconstituir los sectores populares y la base de la clase trabajadora.»
La Confederación General del Trabajo de la República Argentina (CGT), la mayor confederación sindical del país, reunió sus sindicatos y advirtió que no aceptará ningún retroceso de derechos ni retrasos en las negociaciones. También rechazó las amenazas de Milei sobre la paralización de la obra pública y la privatización de los ferrocarriles y Aerolíneas Argentinas.
«Mucha gente votó a Milei sabiendo lo que iba a hacer, pero pensaban que no les tocaría. Si lo hace, ahí estará la CGT. (…) No vamos a permitir que nos quiten derechos y mucho menos que nos paguen los sueldos» dijo Héctor Daer, representante del sector sanitario en la CGT.
La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) anunció que las drásticas medidas anunciadas por Milei «no son buenas para los trabajadores, como la paralización de las obras públicas que se desarrollan en todo el país».
Pedro Wasiejko, Secretario General del sindicato participante en el TUED, la Federación de Sindicatos de Trabajadores de la Energía, Industria, Servicios y Afines (Fetia), señaló una reciente cumbre de la federación que concluyó en el entendimiento unánime de que «sin desarrollo productivo autónomo, no hay posibilidad de justicia social ni de soberanía nacional. (…) La (cumbre) puso de relieve el enorme potencial de nuestras empresas estatales, así como el profundo conocimiento y la capacidad de sus trabajadores claramente emergentes, en claro contraste con las propuestas de quienes afirman que la única salida es privatizarlas y cerrarlas.»
Julio Acosta, Secretario General de la Federación de Trabajadores de la Energía de la República Argentina (FeTERA) compartió reflexiones sobre la necesidad de construir un Camino Público en Argentina. El siguiente texto fue escrito justo antes de las elecciones, cuando FeTERA se unió a TUED (¡bienvenidos, compañeros!):
«La desnacionalización de las empresas públicas hizo perder soberanía a la Argentina, en esta ofensiva del capital sobre el trabajo, puso de rodillas a nuestro país al punto que actualmente la política económica es dictada por el FMI, y cada tres meses llega a nuestro país una delegación del fondo para verificar si se cumplen los objetivos propuestos por ellos, lo que significa más ajustes para el pueblo trabajador, más dependencia, más atraso.
La única salida para la Argentina es recuperar la soberanía. Deshacer las transformaciones estructurales del neoliberalismo, recuperar la soberanía energética, la soberanía alimentaria (somos un país que produce alimentos para más de 450 millones de habitantes, y hay millones de personas que pasan hambre), así como la soberanía financiera y económica.
Recuperar la soberanía significa descomoditizar el sector energético, nacionalizarlo, renacionalizar los servicios esenciales, cambiar el modelo privatizador por un modelo de propiedad estatal con participación y control de los usuarios y trabajadores, y así recuperar derechos para los trabajadores, los usuarios y la sociedad en su conjunto.» Lea el texto completo de Acosta aquí.
En respuesta a los anuncios privatizadores de Milei, los movimientos sociales nucleados en la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) llamaron a «evitar la destrucción del Estado que propone Milei» y afirmaron que no permitirán «el «nuevo intento privatizador de las empresas públicas.»
«No nos apartaremos ni un milímetro del mandato que nos dieron nuestros afiliados. Antes de irse, el Gobierno actual tiene que garantizar los aumentos prometidos para noviembre y diciembre. Y al próximo, queremos decirle que defenderemos con todas nuestras fuerzas los puestos de trabajo y las políticas públicas conquistadas», afirmó Rodolfo Aguiar, Secretario General de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
«Debemos estar fuertes y unidos porque la salida siempre es colectiva. Necesitamos un Estado fuerte y soberano, y está claro que la mitad de nuestro país no es capaz de valorar la importancia de esto. Es muy angustiante porque los que conocemos la historia de nuestro país sabemos lo que ha pasado con las privatizaciones y el desmantelamiento», agregó Mercedes Cabezas, Secretaria Adjunta de ATE.
El Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) convocó para esta semana asambleas en Radio Nacional, TV Pública y Télam, respectivamente, bajo el lema «Sin medios públicos no hay democracia».