El gobernador de la provincia de Chaco, Jorge Capitanich, en los últimos días estableció públicamente algunas líneas centrales de su gobierno por la pandemia, entre las que se destaca su intención de reformar la Constitución provincial que habilitaría vender el 49% de la empresa eléctrica Secheep. La idea es convertirla a la empresa en una sociedad anónima. La FeTERA se manifestó preocupada por la iniciativa y la gravedad institucional que podría haber en la provincia ya que se podría utilizar al coronavirus como pretexto para avanzar en reformas y privatizaciones.
En 1994, mientras el país avanzaba en reformas neoliberales y las privatizaciones de las empresas estatales, la provincia de Chaco realizó una consulta popular donde se definió que las empresas públicas, como como ejemplo Secheep, no pueden ser vendidas. Por tal motivo, es que Capitanich tendría la intención de avanzar en la reforma constitucional para privatizar parte de la empresa eléctrica, incluso en medio de la pandemia del Covid-19 y el aislamiento obligatorio que está llevando adelante todo el país.
La intención del gobernador chaqueño es avanzar en un “pacto social” para reformar la Constitución provincial. Quiere concretar la “descentralización del Estado”, donde incluiría a la compañía que distribuye electricidad.
La misma intención tendría para el instituto de previsión social (Insssep) para pasarlo a Nación. Desde 1994 la provincia del Chaco tiene establecido el 82% móvil para sus jubilados y jubiladas estatales. Además, otro punto que destacó Capitanich como paso previo para avanzar con la privatización es que su gobierno podría avanzar en fijar la jubilación anticipada obligatoria para los trabajadores/as que estén dentro un rango de edad que el Ejecutivo determinará. Desde la FeTERA (CTA Autónoma) manifestaron su preocupación por los anuncios y por la pérdida de las fuentes laborales.
Prensa FeTERA