Congreso de la FeTERA en La Pampa
La FeTERA reclamará que se cumpla el fallo de la OIT que les reconoce la personería gremial. Exigen que la energía sea un servicio público accesible y criticaron el avance contra los derechos de los trabajadores por parte del gobierno nacional.
El secretario general de Luz y Fuerza La Pampa, Julio Acosta y José Rigane, Secretario General de la Federación de Trabajadores de la Energía de la República Argentina (FeTERA-CTA), dieron inicio a un nuevo congreso de la Federación en Santa Rosa.
En conferencia de prensa, Acosta recordó que la FeTERA “es una Federación de Trabajadores de la Energía, que aglutina a sindicatos que tienen que ver con la energía eléctrica, el petróleo, el gas y la energía atómica y sus centrales nucleares”.
El XVII Congreso Nacional Ordinario y al XIX Congreso Nacional Extraordinario se desarrollará este viernes 31 y el sábado 1 de abril a partir de las 9 en la sede del sindicato de Luz y Fuerza de La Pampa (Sarmiento 623).
“Esta federación nació en un momento en que los dirigentes sindicales se habían convertido en cómplices y del neoliberalismo, en la década del 90. La Federación nació en el 95, en el marco de luchas de resistencias que se hacían contra el proceso de privatizaciones que estaba en marcha en ese momento”, recordó el dirigente gremial.
Acosta dijo que han transcurrido más de 20 años y que el desguace del Estado planteado en los 90, todavía continúa. “Hoy esa situación se va agravando cada vez más. En ese marco y en el marco de la resistencia al neoliberalismo y la lucha de clases, donde se hace evidente quienes son los que se benefician y quienes se perjudican, es que se hace este congreso de FeTERA para prepararnos y confluir con el resto del movimiento obrero para dar nuestras luchas particulares sobre temas de energía eléctrica, gas y petróleo, entre otra temática”, expresó a Plan B Noticias.
Por su parte, José Rigane dijo que la “FeTERA es una demostración concreta de que no existe democracia y libertad sindical. Hace 16 años que solicitamos la personería gremial, con tres dictámenes a favor de la OIT y ni el gobierno anterior, ni este gobierno, reconoce esa personería gremial, la niega y no la otorga, a pesar de tener que hacerlo debido a la OIT, a la que Argentina está adherida y los convenios internacionales forman parte de la Constitución Nacional”, dijo.
“Es una vergüenza para el país que esta organización que cumplió con toda las reglamentaciones técnicas y normativas, no puede obtener esa personería gremial, por negativa de los gobiernos y es una demostración que es una decisión política que atenta contra la libertad y la democracia sindical, ya que no nos permite asumir la responsabilidad de la ley 23551, respecto de la representación colectiva, el conflicto colectivo y el convenio colectivo. Esa es la situación en la que estamos haciendo este Congreso”, precisó.
“En cuanto a la situación energética en el país, es compleja. Se sigue tomando como mercancía, como si se tratara de un comodity y el objetivo central es la propiedad de la energía y la obtención de ganancias, por quienes la tienen”, criticó.
Rigane agregó que desde la privatización y la extranjerización, la energía pasa a ser un objetivo de disputa de grupos internacionales. “Estos la manejan a su arbitrario antojo e imponen las condiciones de desarrollo y sobre todo quién puede acceder o no a esa energía”, dijo.
“Hoy en día entendemos que la energía es un bien social y un derecho humano. Todo el mundo debe acceder a la energía porque estamos en el siglo 21 y esto significa poder acceder a una vida digna. Quien no accede a la electricidad, agua y gas, no tiene una vida digna”, dijo.
“Y cuando se decide que solo acceden quienes pueden pagar precios altísimos, lo que se privilegia es el negocio y ahí queda claro que no es lo mismo que esté en manos del Estado o de grupos económicos extranjeros”, agregó.
“Por eso hoy padecemos en la actualidad que hay una franjan de argentinos que no pueden acceder a la energía porque no la pueden pagar y otros disfrutan de piletas climatizadas, porque no tienen inconvenientes en poder pagarlo”, criticó.
“Lo que se trata no es de un bien suntuario ni de lujo, sino de acceso a la vida. Por eso debería primar el concepto de servicio público, que existe en términos teóricos, pero la realidad es que luego nos sumerge en tarifazos, como sucederá en este momento, con los aumentos del gas, que no serán menores al 40% y que luego volverán a incrementarse en septiembre y en abril del 2018. Es decir que seguimos trabajando en función de los intereses de rentas de los grupos multinacionales y pagando lo que no se paga en el mercado internacional”, dijo.
“Y todo esto se hace en función de nuestros recursos propios, nuestras riquezas y sobre las espaldas de los usuarios, que pagan lo que no pueden por un servicio que es ineficiente, discontinuo y malo”, agregó.
—¿Se puede plantear esta forma de ver la energía en un gobierno como el de Macri?
—Nosotros necesitamos transformaciones de fondo y cuando decimos que hay que cambiar el modelo económico y social, tiene que ver con el todo. Esto es salir de este modelo extractivista, contaminante que desarrolla el monocultivo y que reprimariza la economía de Argentina.
Rigane agregó que esto sumerge al país en la desocupación y la pobreza. “Además, imposibilita el desarrollo industrial y esa transformación que proponemos, requiere de iniciativas políticas que nos permitan llevar adelante objetivos que contemplen al conjunto de los argentinos”, dijo.
“Por tener una política que solo atiende a una franja y a un sector determinado de la sociedad y no contempla al conjunto de 44 millones de habitantes, es que vivimos en el marco de políticas de ajuste y de política de quitas de derechos o no respetar instituciones de la democracia, como son las paritarias libres”, dijo.
“Este es un gobierno constitucional que fue electo por el voto popular que respetamos, pero es evidente que desarrolla políticas que van en contra de nuestros intereses y de nuestros derechos. Nosotros confrontamos contra esa política, porque intentamos defender intereses, derechos y reivindicaciones, por eso no entendemos como no se respeta instituciones como las paritarias libres -y el caso más emblemático es el de los docentes- en el escenario público nacional”, agregó.